105 Conferencia OIT Intervención ante el Plenario Quim Boix, Secretario General de los Pensionistas de la FSM
105 Conferencia OIT
Intervención ante el Plenario
Quim Boix, Secretario General de los Pensionistas de la FSM
Señoras y señores.
Me dirijo a ustedes como teóricos representantes de los 7.000 millones de habitantes de este planeta, y lo hago para recordarles las importantes reivindicaciones de los y las Pensionistas y Jubilados.
El pasado año ya lo hice en este mismo foro, pero parece que no escucharon nuestras justas peticiones. Seguimos sin una pensión pública universal para los mayores de 60 años que garantice, en cualquier país del mundo, poder vivir dignamente, es decir tener agua potable, alimentos sanos y suficientes, una vivienda habitable, sanidad y cultura públicos, gratuitos y de calidad, transporte de cercanía suficiente y gratuito.
Son necesidades elementales que los gobiernos del mundo podrían asegurar si en lugar de vivir en una sociedad capitalista viviéramos en una sociedad socialista. Si en vez de ir aumentando la riqueza de los que ya son ricos, la riqueza llegara a todos los seres humanos. Ustedes saben que la riqueza sigue concentrándose cada año en menos manos, ahora son ya solo 62 personas, las más ricas del planeta, las que acumulan igual riqueza que la mitad de la Humanidad. 62 tienen igual que 3.500 millones, es decir de promedio las más ricas tienen cada una igual riqueza que 57 millones de personas. Una vergüenza y una injusticia que ustedes y el capitalismo no quieren y por ello no podrán nunca resolver.
Por ello los Pensionistas afirmamos que riqueza hay suficiente en el planeta para dar satisfacción a nuestras justas reivindicaciones. Otro ejemplo de ello es el dinero, los miles de millones, que ustedes, gobernantes, están usado para promover las guerras imperialistas, a través de su instrumento la OTAN. Solo con cambiar el destino de lo que gastan en armas se podrían destinar cada año cientos de euros a cada ciudadano del planeta.
Pero el capitalismo no tiene por objetivo satisfacer las necesidades de las personas, solo pretende enriquecer a los más poderosos. Por ello ustedes, gobernantes capitalistas, ahora pretenden aprobar el TTIP como nuevo instrumento para que las multinacionales sean cada vez más ricas. Pero esta aprobación deben hacerla calificando de secretos los documentos base del acuerdo. Esa es la falsa democracia burguesa.
Mientras en Cuba, por solo citar una revolución socialista, los gobernantes hacen participar a todo el pueblo en el debate de las nuevas leyes, ustedes, los capitalistas, se esconden del pueblo para aprobar las leyes mundiales que obligarán a cambiar la legislación económica, laboral y social de todos los países. Están aplicando la dictadura del capital.
Los Pensionistas sabemos, como veteranas y expertos, que democracia es participación, es saber escuchar las justas reclamaciones.
Históricamente los veteranos de cada pueblo eran los sabios que con sus consejos ayudaban a mejorar el funcionamiento de cada sociedad.
Ustedes que afirman que son demócratas, aunque en realidad no lo practican, por lo menos escuchen esta voz, que no es la mía, es la de la experiencia de las personas que hemos vivido más de 60 años y que pronto seremos el 20 % de la población mundial y el 30 % de los ciudadanos con derecho a voto.
Sepan que nos estamos organizando por todo el planeta.
El pasado año, en esta misma tribuna, exactamente el 4 de junio, ya les anuncié que nos estábamos organizando.
Sepan que ya hicimos, en la Universidad Andina Simón Bolívar, radicada en Quito, Ecuador, el pasado 30 de setiembre, la primera Conferencia de organizaciones de Pensionistas con posiciones clasistas, es decir anti capitalistas.
Sepan que el próximo 20 de julio, haremos en Dinamarca, la primera Conferencia Europea de Pensionistas.
Sepan que le seguirán la de África, en noviembre en Dakar, Senegal, y la de Asia-Oceanía, en diciembre de este año en Nepal.
Si señoras y señores, los Pensionistas nos estamos organizando, y estamos decididos a seguir luchando por nuestras justas reivindicaciones hasta el último día de nuestras vidas. Y luchamos al lado de nuestra clase, la clase obrera, la clase explotada, la clase que los capitalistas necesitan para poder sacar sus millonarios beneficios, aplicando lo que Karlos Marx explicó, es decir aplicando la explotación del hombre por el hombre.
Como Pensionistas organizados decimos un gran NO a los Fondos Privados de Pensiones, que solo existen para enriquecer a los que los promueven, como todo negocio en el capitalismo.
Lo decimos como única organización mundial de sindicatos de Pensionistas, que, dentro de la FSM, con sus 71 años de existencia, va a participar en Sudáfrica en su 17 Congreso. Aprovecho esta tribuna para saludar éste que será histórico Congreso de la Federación Sindical Mundial, y para agradecer también al histórico sindicato COSATU
de Sudáfrica su compromiso con la FSM, un sindicato que luchaba clandestinamente contra el maltrato a los negros, mientras los pro capitalistas apoyaban el apartheid.
Lo decimos como demócratas, que luchamos para que la opinión de la mayoría de la población, y dentro de ella los Pensionistas, sea tenida en cuenta.
Y lo decimos dentro de la OIT que pronto cumplirá 100 años de existencia y que en su última etapa ha demostrado no ser una organización democrática. Y ustedes lo saben. Aquí en la OIT se prima a los pro capitalistas. Clara muestra de la no democracia en la OIT es que nuestra organización mundial, con más de 92 millones de trabajadores afiliados, a través de 320 sindicatos implantados en 120 países de los 5 continentes, no tiene ni un solo representante en la dirección de la OIT, mientras nuestra contrincante, como organización sindical mundial, me refiero a la CSI, tiene el 100 % de los puestos que corresponden a todos los sindicatos en la dirección de la OIT.
Los Pensionistas les decimos, como expertos y veteranos : <<nada que sea injusto ha perdurado en la historia de la Humanidad.>>
Por ello el capitalismo no perdurará, se está autodestruyendo y nosotros los Pensionistas, al lado de nuestra clase, la clase obrera, vamos a ayudar a destruirlo. Solo así nuestras justas reivindicaciones terminarán siendo una realidad.
Gracias.
Ginebra, a 6 de junio de 2.016